El Paseo del Cine de Tabernas cuenta con más de una decena de butacas dedicadas a diversos actores y actrices

El Paseo del Cine de Tabernas es sin duda uno de los lugares más peculiares de esta localidad almeriense. Creado en 2018, su objetivo era dejar un legado histórico sobre el ámbito cinematográfico y potenciar el turismo en la zona.

Situado nada más entrar a Tabernas por la primera entrada desde la N-340a, a apenas unos metros de la Oficina de Turismo y bajo la mirada del Castillo de Tabernas, cuenta con doce butacas dedicadas a actores o directores que han rodado películas en este municipio: Sara Montiel, Mónica Randall, Enzo G. Castellari, Sancho Gracia, Terence Hill, Alberto Dell’Aqua, George Martin, Sal Borgese, Claudia Cardinale, Alex Cox, Ángel del Pozo y la más reciente, la de Franco Nero.

Sin duda, el Paseo del Cine de Tabernas evoca por su recuerdo, simbolismo y una estructura similar al Paseo de la Fama de Almería (que se sitúa al lado del Teatro Cervantes, en el Paseo de la capital), que también cuenta con más de una decena de menciones, en su caso, en forma de estrella, al estilo hollywoodiense.

La historia del cine de Tabernas

Silla de Claudia Cardinale. | Javier Cortés/QVEA

Para entender este paseo hay que remontarse a la historia del cine de Tabernas. A partir de los años 60 se empezó a rodar una buena cantidad de filmografías por el desierto de este municipio almeriense, por los decorados del Fort Bravo, con su apariencia similar a los paisajes típicos del oeste americano y por un sinfín de aspectos que han hecho de este municipio un referente del cine.

Y es realmente a partir de los años 60 cuando se empiezan a rodar películas de alcance: Lawrence de Arabia (1962); Cleopatra (1963); Por un puñado de dólares (1964); La muerte tenía un precio (1965); o El bueno, el feo y el malo (1966). Después llegarían muchas más, entre ellas Patton (1970); ¡Agáchate, maldito!; Conan el Bárbaro (1982); Indiana Jones y la Última Cruzada (1989), 800 balas (2002).

En los últimos años ha habido un nuevo auge del western y se están haciendo muchas producciones, lo que ha llevado a que Tabernas acoja un importante festival de cine del oeste. El apoyo de las instituciones ha sido clave para que año tras año se siga rodando western en Tabernas y la fuerte demanda de la sociedad con respecto a este género ha influido en las plataformas, productoras y televisiones. Y es que desde que Ridley Scott pisó Tabernas para el rodaje de Exodus (2013), y más adelante la serie Juego de Tronos hiciera escala en la rambla del Búho, el volumen de producciones ha crecido exponencialmente, también en épocas en las que no era muy habitual como en pleno verano.

El cine como forma de vida

Volviendo al Paseo del Cine de Tabernas, los elementos claves de esta pequeña ruta son las sillas realizadas por la carpintería de Cecilio, una carpintería metálica local, que las hace de forma artesanal. De hecho, este caso no es el único. Que Tabernas sea un filón para el cine nacional e internacional ha conseguido que varios tabernenses tengan el cine como empleo fijo y como su forma de vida, ya sea como montadores de decorados, de arte, ayudando a productoras, que han fomentado una comunidad en torno al trabajo y que se aprovechara la juventud para seguir creciendo.

Tabernas no es solo el único desierto de Europa, un MiniHollywood o un Fort Bravo, un paisaje preciosista o un lugar emblemático de la provincia de Almería y rodeado de buenas gentes sino también un lugar donde se premia a quienes los han hecho crecer a base de películas, series y proyectos audiovisuales y que han puesto a Tabernas en el mapa mundial del western y del cine.

Adentrarse en el norte de la provincia de Almería es descubrir el Parque Natural Sierra de María-Los Vélez

Adentrarse en el norte de la provincia de Almería es descubrir la Muela de Montalviche, el Mahimón, el extenso bosque de la Alfaguara, el impresionante macizo de la sierra de María o monumentos naturales como la Sabina Milenaria, además de contemplar la rica fauna que puebla la zona y la amplia variedad de especies vegetales que hacen único al Parque Natural Sierra de María-Los Vélez.

La riqueza natural de Sierra de María-Los Vélez tiene su colofón en el tesoro cultural que tienen Vélez-Blanco, Vélez-Rubio, María y Chirivel, municipios por los que discurre el parque y en los que el hombre se asentó hace más de 15.000 años: así lo atestiguan los yacimientos de la cueva de Ambrosio, la cueva de Los Letreros o la cueva de las Colmenas, donde podemos encontrar la figura del Indalo, símbolo de la provincia, todas ellas declaradas Patrimonio de la Humanidad.

Pintura en la cueva de Los Letreros. | Lázaro Martínez/QVEA

Recepción a los visitantes del Parque Natural

A la hora de acercarnos al parque y tener un primer contacto con el entorno se hace obligatoria la primera parada en alguno de los dos centros de recepción de visitantes que alberga el espacio natural. El Almacén del Trigo en Vélez-Blanco y la Umbría de la Virgen a dos kilómetros de María por la A-317 ofrecen al visitante un primer contacto con el parque. Un espacio en el que, a base de paneles explicativos, maquetas y elementos interactivos se pueden descubrir de un vistazo las 22.562 hectáreas del espacio protegido acercándose el turista a la fauna, la flora, monumentos o los yacimientos prehistóricos.

Se trata de un punto de encuentro en el que el viajero va obtener toda la información, desde actividades, senderos o puntos de interés. La dotación didáctica del parque se completa con el jardín botánico Umbría de la Virgen, situado en la falda de la sierra a un kilómetro de María por la A-317 a la izquierda.

Un bello paseo entre almendros que nos acercan hasta la ermita de la Virgen de la Cabeza para adentrarnos en los primeros pinares al llegar al jardín botánico. En un espacio de 40 hectáreas se puede conocer la flora que habita el parque, además de las formaciones vegetales en las que se ubican. Ello posibilita conocer en cuatro kilómetros de senderos el rico patrimonio natural de la zona o descubrir especies endémicas como la Centaurea Mariana.

La Sabina Milenaria, el habitante más longevo de Sierra de María-Los Vélez

El recorrido por el parque nos traslada hasta Chirivel para descubrir una de las joyas que esconde: la Sabina Milenaria, a 1.600 metros de altura. Pero antes de subir a este Monumento Natural es necesario obtener permiso para acceder por estar situada una zona de reserva. Para ello hay que dirigirse al CEDEFO de Vélez-Blanco, donde se encuentra ubicada la oficina del Parque Natural.

Al llega a Chirivel, en la carretera principal del municipio, un indicativo nos señala la dirección por la calle Camino del Puerto. Tras cruzar bajo la autovía A-92N el camino asfaltado se convierte en una pista forestal que seguiremos unos 5 kilómetros. El comienzo del sendero de la Sabina se encuentra señalizado a la derecha. Un camino serpenteante de 9,8 kilómetros entre pinares que lleva a descubrir este tesoro natural, al habitante más longevo de la comarca con casi un milenio.

Sabina Milenaria en Chirivel, en Sierra de María-Los Vélez. | Lázaro Martínez/QVEA

Julio Alfredo Egea al conocer su edad dijo “Sentí el vértigo del paso del tiempo bajo su sombra. Me sentí efímero y pequeño bajo aquel árbol que había resistido al tiempo y las hachas, que sabía del paso de tantas civilizaciones bajo sus ramajes, que había presenciado la llegada de mil primaveras”.

Este ejemplar de 20 metros resiste solitario al paso del tiempo. Lo hace bajo la roca de la sierra que la contempla y la vigilancia de las ovejas que la custodian día tras día. No es de extrañar que los lugareños, al visitar la Sabina Albar, se sientan parte de la historia de un lugar mágico. Un lugar que, al entrar en su interior, te llena de paz y te hace sentirte vinculado para siempre con la Sabina Albar.

Vélez-Blanco y Vélez-Rubio, el corazón del Marquesado de Los Vélez

En el corazón del Marquesado de Los Vélez se sitúan Vélez-Blanco y Vélez-Rubio, dos poblaciones en las que el patrimonio histórico, monumental y arquitectónico es de un gran valor, como atestiguan los estilos gótico tardío, mudéjar, renacentista o barroco que se observa en sus edificaciones. Además, de un estilo propio, el clásico velezano que define la simetría de las edificaciones señoriales de los siglos XIX y XX. Ello les ha valido el reconocimiento de Bien de Interés Cultural a los cascos históricos de los dos Vélez.

En Vélez-Rubio destaca la iglesia de la Encarnación, joya del barroco almeriense, así como las iglesias de San José y del Carmen o el convento de la Inmaculada. En cuanto a las edificaciones civiles sobresale el Hospital Real, hoy sede del Museo Comarcal Miguel Guirao y el Palacio de las Damas Catequistas, antiguo palacio del Marqués de Los Vélez, además de multitud de casas modernistas e historicistas a lo largo de todo el casco histórico.

El castillo de Vélez-Blanco

Castillo de Vélez-Blanco y Muela de Montalviche. | Lázaro Martínez/QVEA

Continuando por la A-317 llegamos a Vélez-Blanco. Allí destaca el castillo renacentista de los Fajardo, quien contempla desde las alturas las casitas blancas que se desparraman por su falda en el barrio de la Morería para llegar hasta la iglesia de Santiago Apóstol, de estilo mudéjar, o el convento de San Luis, así como la arquitectura de las casas con abundante rejería, encaladas y teja árabe sobresalen en el conjunto.

Vélez-Blanco cuenta además con un enjambre de senderos que permiten conocer todo el patrimonio natural y artístico del municipio hasta Topares. Es el parque un espacio lleno de naturaleza y aire puro. En él, se da una simbiosis perfecta entre naturaleza, el castillo y los yacimientos arqueológicos. Algo que pocos lugares pueden ofrecer, y que hacen un privilegio vivir en él. O recorrer la Muela de Montalviche, un espacio en el que perderse entre pinares y subir a la cumbre a más de 1.500 metros, donde las vistas del pueblo y del parque son maravillosas.

La Alfaguara, uno de los bosques mejor conservados de Almería

Si continuamos ascendiendo llegamos a María, situada a 1.200 metros, lo que permite que en sus inviernos las nieves cubran la sierra. En este caminar por el parque llegamos hasta la cara norte, donde podemos descubrir una abundante masa forestal de pinares en la Alfaguara siendo uno de los mejores bosques conservados de la provincia y coto de caza en la época de Felipe II. Se trata da una densa masa vegetal compuesta por pino carrasco, encinas, pino laricio y caducifolios. En las zonas altas viven mamíferos como la ardilla, el tejón y se pueden observar rapaces como el águila calzada, el azor o el gavilán.

Adentrándonos en los pinares por la A-317 camino de Orce podemos disfrutar de varias zonas recreativas como La Piza o el Camping Sierra de María, punto de partida de senderos y lugar para multitud de actividades en la naturaleza, además de disfrutar en sus restaurantes, abiertos todo el año, de los embutidos de la zona o el cordero segureño, así como platos típicos como gurullos, migas o arroces.

Del punto más alto a las profundidades de la tierra

La Comarca de Los Vélez en general y el Parque Natural Sierra de María-Los Vélez en particular ofrecen por su situación geográfica descubrir abruptas sierras que van desde los 700 a los 2.045 metros de altitud del pico de La Burrica, punto más alto de la sierra o a buscar en las profundidades de la tierra en la veintena de cavidades que encontramos.

A esto hay que sumar el legado que dejaron los primeros pobladores de esta tierra con multitud de yacimientos en los que el hombre ha dejado su impronta a través del arte rupestre. Junto a todo esto, existe un importante legado en torno a la cultura del agua con 63 inmuebles catalogados, entre molinos hidráulicos, balsas, lavaderos, aljibes, abrevaderos, acueductos de diferentes estilo y épocas.

En este recorrido no se puede olvidar la rica gastronomía que ofrece la comarca con importantes bares y restaurantes. Algunos de ellos, distinguidos con la marca Parque Natural.

La espectacular escultura de casi seis metros de altura está incluida en el Libro Guinness de los Récord como el mortero más grande del mundo

La historia de Macael está esculpida en mármol blanco. Una historia con más de 25 siglos a través de la que este municipio del Valle del Almanzora ha dejado una huella imborrable en el arte. Un legado de obras majestuosas alzadas en su ‘oro blanco’, como la Fuente de los Leones de la Alhambra de Granada, el Palacio Real de Madrid o el mismísimo Teatro Romano de Mérida.

Letrero de mármol a la entrada a Macael. | María José Martínez/QVEA

Macael y mármol son dos palabras inseparables. Sus canteras, muy próximas a la urbe, han sido explotadas desde tiempos muy remotos, convirtiéndose en la base de su economía y de la de gran parte de la comarca. En la actualidad, el pueblo es el mayor productor de mármol de España, y su prestigio y reconocimiento es mundial. Los macaeleros han sabido transmitir su riqueza y tradición de generación en generación, llegando a ser la cantería del mármol de Macael candidata a Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO.

Macael, un museo enorme de mármol blanco

Visitar Macael es visitar un museo enorme de mármol blanco. Su cultura se respira tan solamente con pisar su entrada, donde la bienvenida la da un enorme edificio de fachada curvada elaborada al completo con esta majestuosa piedra. Se trata del Centro Tecnológico Andaluz de la Piedra. Tan solo unos metros más adelante, se puede leer en una magnífica escultura de mármol blanco, gris y amarillo que hemos llegado a nuestro destino: Macael.

Cada rotonda que encontramos a nuestro paso no deja margen de error de su cultura, pues cada elemento está elaborado en su oro blanco. La amplia avenida de Andalucía nos dirige al encuentro con uno de sus monumentos más emblemáticos.

Por el instituto Juan Rubio Ortiz y el Colegio Público Nuestra Señora del Rosario la vida no se detiene y sus alumnos juegan animados en el patio. Enfrente, el alboroto habitual en el Centro de Salud y la farmacia, un gran punto de encuentro para los macaeleros. Otros salen de la consulta de don Enrique, o quedan para desayunar tras su cita con los dentistas Ana y Ambrosio. Antonio ‘Piscinas’ ultima sus menús en el Restaurante Los Membrives, muy reconocido por su gran cocina y por su delicioso ‘mero Membrives’. La rutina tiene mucho encanto en este pueblo donde todos son una gran familia, y hacen de su localidad un hogar para todos los visitantes.

El mortero de mármol más grande del mundo

Mortero más grande del mundo en Macael
El mortero más grande del mundo, en Macael. | María José Martínez/QVEA

Es prácticamente imposible no verlo. El mortero de mármol más grande del mundo corona la avenida. Una majestuosa escultura de nada más y nada menos que 50.000 kilos de mármol de Macael. La anchura de su base es de tres metros de diámetro, elevados hasta los 5,4 metros en la parte superior. Tal es su dimensión que en el año 2016 fue incluido en el Libro Guinness de los Récord como el mortero más grande del mundo.

Esta pieza es el reflejo de una de sus señas de identidad: un mortero clásico para machacar los ingredientes. Es un objeto muy popular que se ha convertido hoy en día en un icono turístico para el municipio almeriense, y que construye un homenaje a sus artesanos del mármol. Además, en los últimos años se ha hecho muy conocido por su utilización en las cocinas de los cocineros más prestigiosos.

Empresas locales, una grúa y algún contratiempo

Avenida de Andalucía en Macael. | María José Martínez/QVEA

La talla se comenzó a construir en el año 2015. En su elaboración participaron empresas locales como Grupo Cosentino y Pimar Stone, que cedieron el material para hacerlo. Además, los también macaeleros Arriaga Artesanos del Mármol se dedicaron a esculpir la obra, que está valorada en más de 300.000 euros.

Antes incluso de que existiesen los talleres de artesanía en el pueblo, su elaboración, desde el momento en el que se trazaba la pieza hasta que se tallaba con punteros y amolado, señalaban el final de una etapa en la que los jóvenes pasaron de ser aprendices a canteros.

Para su instalación en el encuentro entre la avenida de Andalucía y la avenida de Ronda fue necesaria una gran grúa y tampoco faltaron los contratiempos, pues el mazo gigante se partió cuando iba a ser colocado y consiguieron arreglarlo en tiempo récord.

El mortero más grande del mundo es solamente una de las grandes obras de arte que se pueden visitar en el pueblo, pues si nos adentramos más en sus calles y sus plazas podremos ver una réplica exacta de la Fuente de los Leones de la Alhambra, el recién restaurado Monumento al Cantero, o pasear por su bulevar repleto de escultura. Sin duda, Macael es cultura. Macael es arte.

La obra completa de fotografías de Pérez Siquier, en Olula del Río, en el primer museo de España dedicado a uno de los grandes fotógrafos clásicos

Mientras avanzamos por la autovía A-334 que pasa por Olula del Río, podemos observar su Vía Verde. En ella se cruzan ciclistas, caminantes y corredores que se saludan alegremente. Unos kilómetros más hacia adelante, una espectacular escultura en mármol blanco de Macael anuncia que hemos llegado a nuestro destino: la Ciudad de la Cultura de Olula del Río. Se trata de ‘La Mujer del Almanzora’. Una obra del artista Antonio López que custodia sus tres museos. Uno de ellos, dedicado de forma íntegra a las fotografías de Pérez Siquier.

Acceso al Centro de Fotografía Pérez Siquier en Olula del Río. | María José Martínez/QVEA

El Paseo de las Esculturas con flamantes Dionisios de piedra blanca nos da la bienvenida a esta gran cita con el arte. Tras él está ‘La Mujer del Almanzora’, una de las escultura más grandes de España, formada por 82 piezas de mármol de Macael, con un peso de 180 toneladas y más de ocho metros de altura. Al frente, un edificio blanco y azul: el Museo Casa Ibáñez. Una de las mayores colecciones de Arte Contemporáneo de Andalucía creado por el pintor Andrés García Ibáñez, un artista de valorada trayectoria dentro del Realismo contemporáneo. Y a la derecha, el encuentro con la gran obra de Carlos Pérez Siquier. En ese edificio de más de 1.000 m2 se encuentra el archivo completo de fotografías de Pérez Siquier. Es el primer museo de España que está dedicado a uno de los grandes fotógrafos clásicos. Entrar en él es ponerse esas gafas inseparables y ver el mundo a través de sus ojos.

Sala de ‘La Chanca en color’. | María José Martínez/QVEA

Carlos Pérez Siquier

De cabello rubio y ojos dulces escondidos tras unas gafas. Solía vestir camisa desenfadada y normalmente llevaba un bolígrafo en su bolsillo. La cámara siempre en mano, y en su corazón. Tal era su aspecto que muchos pensaban que era americano. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Almería era su tierra y su hogar.

Hablando de hogar, fue precisamente en la boardilla de su casa donde se enamoró de la fotografía, con tan solo quince años. Su padre, Joaquín Pérez, se aficionó a este arte y él descubrió en aquel rincón la magia del rebelado. Desde entonces, Carlos Pérez Siquier observaba el mundo a través de su objetivo.

Su mirada era diferente a la de todos los demás. Corrían los años 50 entre posguerra, pobreza y franquismo. Pero él estaba alejado de los cánones tradicionales y supo adelantarse a su tiempo sin ningún tipo de cobardía por los años presentes.

Colección ‘La Chanca en color’. | María José Martínez/QVEA

Carlos Pérez Siquier nació en Almería un frío mes de diciembre de 1930. Su historia es la historia de La Chanca. La de verdad. La de las casas de colores y su vida cotidiana en las calles. Cada fin de semana que trascurrió entre los años 1956 y 1965 cogía su cámara de fotos y se iba hasta este barrio. En silencio, y sin apenas saludar a los vecinos, comenzaba a capturar ese mundo en blanco y negro primero, y a todo color después. De esta manera captaba la esencia de las barriadas pobres de España durante la posguerra.

Esa colección de fotografías de Pérez Siquier le cambió la vida, pues le encumbró como uno de los autores más vanguardistas de la fotografía española. Eran fotografías sin barreras. Junto a su fiel amigo José María Artero, entró en la Agrupación Fotográfica Almeriense, a través de la que lideraron la revista AFAL, que se publicó entre los años 1956 y 1962. Con ella consiguieron traspasar fronteras y para él, en sus propias palabras, “AFAL era el Internet de la época”. Y consiguieron captar la atención de los fotógrafos jóvenes.

La Chanca, en blanco y negro y en color

Volviendo al Centro Pérez Siquier en Olula del Río, el recinto está dividido en ocho salas. Un prototipo original de la ‘Mujer de Coslada’ de Antonio López corona la primera sala. Se trata de una escultura que parece rozar el cielo por su gran magnitud. Es ella la que se encarga de custodiar ‘La Chanca en blanco y negro’ de Carlos Pérez Siquier. La mítica serie neorrealista de los vecinos del barrio almeriense.

La niña de La Chanca de Pérez Siquier. | María José Martínez/QVEA
La niña de La Chanca de Pérez Siquier. | María José Martínez/QVEA

En muchas ocasiones, esta era simbolizada por su fotografía más representativa, la de la niña blanca de La Chanca. La mirada de aquella chica cautivó al fotógrafo, pero también a su público. “Ella me estaba ofreciendo su interior y yo lo eternicé”, explicó en una ocasión. Medio siglo después la protagonista volvió a aparecer en la vida de Pérez Siquier. Se llamaba Ángeles Domínguez y vivía en Londres. Esta viajó hasta Almería para conocer al artista, que la fotografió en el mismo lugar y le dio la copia original.

En la sala 2 nos trasladamos hasta los años 60, haciendo una parada en ‘La Chanca en color’. El barrio se iluminó entonces. Con esta colección tiene una visión más estética de aquel lugar, dando protagonismo a sus bonitas casas de colores alegres. Así se ensalzaba su vida cotidiana.

La playa de los 70, turismo en la costa mediterránea

Viajamos hasta ‘La playa de los 70’ en la siguiente sala. Allí predomina la ironía y el acento pop sobre el turismo masivo en la costa mediterránea. Lo cierto es que esta obra le dio una gran fama al fotógrafo almeriense y lo convirtió en uno de los pioneros de la fotografía en color de todo el mundo. Otras dos estancias albergan el ‘Color del sur’ y algunas obras que reflejan la belleza de Cabo de Gata.

Recientemente, el Centro Pérez Siquier inauguró, con la presencia del artista, la ampliación de su superficie expositiva. Un punto de encuentro con la historia de la fotografía a través de más de 120 obras. Esta colección la completan una recopilación bibliográfica con ejemplares de AFAL, su Anuario de la Fotografía Española de 1958 y otras publicaciones de aquella generación tan mítica.

En una ocasión Carlos Pérez Siquier advirtió que moriría “con las fotos puestas”. Y lo cumplió. El 14 de septiembre de 2021, a los 90 años, falleció en su Almería natal, pocos días después de visitar por última vez su centro fotográfico. Pero lo cierto es que el artista seguirá vivo en cada una de las obras con las que consiguió prolongar la vida, y retratar primero a una España oprimida en blanco y negro, y una España a todo color que luchaba por salir de aquello un tiempo después.

Visitar el Centro Pérez Siquier de Olula del Río

El Centro Pérez Siquier, ubicado en la Plaza de la Cultura número 1, es un espacio dedicado a la vida y a la historia del fotógrafo almeriense. Visitarlo es muy fácil porque está abierto todo el año, incluidos los festivos, de martes a domingo. Los únicos días que este museo de la Ciudad de la Cultura de Olula del Río está cerrado son los lunes y el 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre. Además, la entrada es totalmente gratuita.

Horario del 1 de octubre al 31 de marzo:  Está abierto por las mañanas de 11:00 a 14:00 horas, y por las tardes de 18:00 a 20:00 horas.

Horario del 1 de junio al 30 de septiembre: Abierto por las mañanas de 11:00 a 14:00 horas y por las tardes de 19:00 a 21:00 horas.

Si quieres hacer una visita guiada al Centro Pérez Siquier, se debe concertar previamente llamando a los teléfonos 950 441 017 o al móvil 628 230 872. El coste por persona es de dos euros, y cada grupo tendrá un mínimo de 10 participantes.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Finalizada la visita, no puedes irte de Olula del Río sin disfrutar de su deliciosa gastronomía. Muy cerca del centro de fotografías de Pérez Siquier está ubicado uno de sus restaurantes más míticos: el Mesón de Huitar. Concretamente, en la calle Huitar Mayor número 30, en la carretera del Polígono Industrial. Allí podrás degustar tanto platos tradicionales como innovadores, aunque son especialistas en carnes a la brasa. ¡No te vayas sin probarlas!

La serie de HBO rodó diferentes escenas en Carboneras, Sorbas, Tabernas, Pechina y Almería capital

Hace 70 años que comenzó el idilio de Almería con el cine. En 1951, por primera vez los paisajes de la provincia acogían un rodaje: el de la película La llamada de África. Desde entonces son cientos los filmes, cortos, anuncios y videoclips que se han grabado en sus diferentes rincones. De entre los más recientes destaca la serie Juego de Tronos, que eligió hasta cinco lugares diferentes para recrear el universo de Poniente en el año 2015.

En el recorrido por los escenarios de Juego de Tronos en Almería, el viajero puede visitar la ciudad libre de Meereen, más allá del Mar Angosto; transitar el peligroso camino desértico hasta los pies de la Madre de las Montañas, para adentrarse en Vaes Dothrak, ciudad de las tribus dothraki; y disfrutar de los jardines del palacio de Lanza del Sol, en Dorne.

Esta ruta incluye cinco municipios almerienses: Carboneras, Sorbas, Tabernas, Pechina y Almería capital. Puede realizarse en el orden que se prefiera, aunque aquí se propone un itinerario partiendo desde el Levante Almeriense para finalizar en la capital. Con una sola jornada es suficiente y, sin duda, merece la pena para los amantes de ‘Juego de Tronos’ (cuidado, hay spoilers si no has visto la serie completa).

Torre de Mesa Roldán (Carboneras): la torre de Meereen

Reunión en mitad de la batalla. | HBO

El viaje comienza más allá del Mar Angosto, en la ciudad libre de Meereen, en la Bahía de los Esclavos. Los productores de la serie encontraron en la Torre de Mesa Roldán (Carboneras) el lugar ideal para uno de los escenarios de Juego de Tronos en Almería en el que ubicar la negociación entre Daenerys Targaryen y los esclavistas durante la batalla que mantienen.

Aparece en el capítulo nueve de la sexta temporada (La batalla de los bastardos). Los grandes amos y Daenerys junto a Tyrion, Gusano Gris y Missandei, se reúnen en medio de la batalla para negociar la rendición. De repente aparece Drogon volando sobre ellos y se posa sobre la Torre de Mesa Roldán. Es uno de los momentos más espectaculares de esa temporada y marca un punto de inflexión en toda la serie.

YouTube

Al cargar el vídeo, acepta la política de privacidad de YouTube.
Más información

Cargar vídeo

La Torre de Mesa Roldán es una de las muchas infraestructuras defensivas que los musulmanes construyeron en la costa almeriense para vigilar la posible llegada de incursiones vikingas. Ya en el siglo IX se tiene constancia de que Abderramán II —cuarto emir omeya de Córdoba— asignó a los Banu Sirag la vigilancia de esta zona. No obstante, su aspecto actual, de “torre pezuña” data de 1766.

Está situada en un domo volcánico con cima plana, en las puertas del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar, junto a la famosa playa de los Muertos. Desde allí se puede divisar una panorámica espectacular de la costa del Cabo de Gata, el faro de Mesa Roldán y el municipio de Carboneras (no se ve Meereen y su pirámide, pero las vistas no están nada mal).

Por cierto, existen dos torres “gemelas” a esta de Mesa Roldán que también forman parte de la infraestructura defensiva del Levante Almeriense: la de Macenas, en Mojácar, y la de Villaricos.

Torre de Mesa Roldán, uno de los escenarios de Juego de Tronos en Almería. | V. Visiedo P./Qué ver en Almería
Torre de Mesa Roldán. | V. Visiedo P./QVEA

Cómo llegar a la Torre de Mesa Roldán, uno de los escenarios de Juego de Tronos en Almería

El acceso a la Torre de Mesa Roldán es muy sencillo, tanto a pie como en coche. Partiendo desde Carboneras hay que coger la carretera AL-5106 en dirección a Agua Amarga. Apenas seis minutos después de dejar el pueblo encontrarán a la derecha el aparcamiento de la playa de Los Muertos (hay un cruce de raqueta para hacer cambios de sentido). Justo allí hay una carretera a la izquierda que sube hacia la torre. Es un camino asfaltado, aunque algo irregular. En cinco minutos en coche se llega hasta la cima (cuidado, hay un momento en el que el camino se bifurca: debes seguir el de la izquierda).

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Cantera de yeso de Majadas Viejas (Sorbas): las puertas de Meereen

Nobles de Meereen asesinados por los Hijos de la Arpía. | HBO

La siguiente parada está a unos 40 kilómetros de distancia pero en la ficción es parte de la misma Meereen. En el espectacular paisaje de una de las canteras de yeso de Majadas Viejas (Sorbas) encontraron el lugar perfecto para situar las puertas de la ciudad custodiadas con esculturas gigantes de arpías.

Este lugar aparece también en el capítulo nueve de la sexta temporada, pero pasa muy desapercibido. Apenas se ve de fondo durante la lucha entre los Hijos de la Arpía y el grupo de dothrakis liderados por Daario Naharis. Pero merece la pena detenerse en esta cantera y ver el espectacular paisaje transformado por la mano del hombre durante décadas. Y es que de Sorbas se extraen cada año miles de millones de kilos de yeso que se exportan desde el puerto de Garrucha a todo el mundo.

YouTube

Al cargar el vídeo, acepta la política de privacidad de YouTube.
Más información

Cargar vídeo

Con suerte puedes encontrar alguna cabra montesa paseando tranquilamente por la cantera. Además, si quieres hacer una parada en la zona, muy cerca está el Mirador de Urra, desde donde hay una impresionante perspectiva del Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas, en donde hay más de 1.000 cavidades excavadas en yeso, con gran cantidad de galerías repletas de estalactitas y estalagmitas, y con kilómetros de galerías excavadas en la roca de yeso, una roca cristalina. Las cuevas merecen una visita.  

Cómo llegar a las canteras de yeso de Sorbas

Cantera de Yeso en Sorbas, otro de los escenarios de Juego de Tronos en Almería. | V. Visiedo P./QVEA

Para seguir el viaje por los escenarios de Juego de Tronos en Almería, partiendo desde Mesa Roldán hay que tomar la carretera hacia Carboneras y desviarse a la izquierda antes de llegar al pueblo para tomar la N-341 que lleva hasta la Autovía del Mediterráneo A-7 (salida de la Venta del Pobre).

Una vez en la autovía en sentido Murcia/Vera, se toma la primera salida (504 Sorbas) para coger la carretera A-1102. Hay que continuar 6 kilómetros (unos 9 minutos) por una carretera sinuosa hasta que se llega a un cruce donde hay que girar a la izquierda hacia el camino señalado como “Cantera de yesos”. Es una carretera estrecha, asfaltada pero con el firme algo deteriorado. A apenas un kilómetro, a la izquierda se encuentra la cantera. El terreno está vallado, pero se puede detener el coche en el arcén y contemplar el paisaje.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Otra opción para llegar a la cantera es ir por la N-340 y tomar carretera A-1102 en el cruce señalado como Los Molinos del Río Aguas. En este caso, el camino de “Cantera de yesos” quedaría a la derecha.

Rambla del Búho y la Tortuga (Desierto de Tabernas): camino hacia Vaes Dothrak

Los dothraki, en el Desierto de Tabernas. | HBO

Si hay un escenario cinematográfico por antonomasia en la provincia de Almería ese es el Desierto de Tabernas. Se han rodado cientos de películas, la mayoría de ellas de género western: Por un puñado de dólares (1964), La muerte tenía un precio (1965), El bueno, el feo y el malo (1966) y tantas otras.

Uno de los paisajes más impresionantes del desierto es la rambla del Búho, donde hay unas formaciones rocosas conocidas como la Tortuga. En este árido lugar rodó Steven Spielberg escenas de Indiana Jones y la última cruzada (1989)

En la sexta temporada de Juego de Tronos por allí pasaron los dothrakis con Daenerys cuando la llevaban cautiva hasta Vaes Dothrak, en los episodios uno y tres de la sexta temporada. Después, vuelve a aparecer en varios capítulos, cuando Ser Jorah Mormont y Daario Naharis van en busca de la “madre de dragones”. Echándole un poco de imaginación uno casi puede ver las enormes estatuas de los dos caballos rampantes sobre las montañas. Para el rodaje hicieron falta cientos de extras llegados desde toda Almería.

YouTube

Al cargar el vídeo, acepta la política de privacidad de YouTube.
Más información

Cargar vídeo

Cómo llegar a la rambla del Búho

Es muy fácil llegar a la Rambla del Búho desde la N-340. Partiendo desde la cantera de yeso de Majadas Viejas, se coge la Nacional en dirección Sorbas/Tabernas. Hay que dejar atrás ambos pueblos y a poco menos de 1 kilómetro del centro urbano de Tabernas se ve un camino a la izquierda de la carretera con dos grandes carteles de Cinema Studios Fort Bravo. Hay que seguir ese camino (cuidado, porque está prohibido girar a la izquierda, así que debes buscar dónde dar la vuelta un poco más adelante en la N-340) y se pasa por debajo del puente por un camino de tierra que no siempre está en buenas condiciones (sobre todo si ha llovido).

Rambla del Búho en Tabernas. | V. Visiedo P./QVEA

Hay que avanzar por la pista de tierra hasta que el camino se divide en dos. Entonces hay que girar a la derecha (no te preocupes si te pasas el cruce, acabarías en Fort Bravo y podrás dar media vuelta) y adentrarse hacia la rambla del Búho por un camino bastante irregular.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Paraje de El Chorrillo (Pechina): Vaes Dothrak

Paraje del Chorrillo como otro de los escenarios de Juego de Tronos en Almería
Vaes Dothrak, la ciudad de los dothrakis. | HBO

Siguiendo el mismo camino que hizo Daenerys Targaryen en cautividad se llega hasta Vaes Dothrak, la ciudad de los dothrakis situada junto a la Madre de las Montañas. Bueno, en realidad está en el paraje de El Chorrillo, en la localidad de Pechina. Un paisaje desértico que se había convertido unos años antes en Egipto para el rodaje de Exodus: Dioses y reyes (2014).

Tras grabarse la película dirigida por Ridley Scott parte de los decorados quedaron en pie y fueron reutilizados para Juego de Tronos. Un conjunto de chozas y calles de cartón piedra por las que se adentran Mormont y Naharis en busca de Daenerys. Merece la pena recorrerlo y hacerse unas fotos o, incluso, grabar algunos vídeos, pues es el único de los set de rodaje que permanecen en un estado similar al que puede verse en la serie.

YouTube

Al cargar el vídeo, acepta la política de privacidad de YouTube.
Más información

Cargar vídeo

En este paraje de Pechina se rodó también una de las escenas más icónicas de la sexta temporada: el incendio del templo dothraki donde se reúne el dosh khaeleen (las antiguas khaleesis, esposas de los khal ya muertos).

Además, a escasos metros hay otros decorados de la serie Penny Dreadful, grabada solo unos meses después (en enero de 2016).

El paraje del Chorrillo ha sido escenario de Juego de Tronos y de otras producciones como Exodus o Penny Dreadful. | V. Visiedo P./QVEA

Cómo llegar al paraje del Chorrillo, otro de los escenarios de Juego de Tronos en Almería

Vaes Dothrak está cerca de la Rambla del Búho, pero no tanto como parece en la serie. Hay que volver a la N-340 en sentido Almería, hasta llegar a la conexión con la autovía A-92. Se coge en sentido Almería y a unos 11 kilómetros (6 minutos), se toma la salida 387 Pechina/Sierra Alhamilla. En la rotonda hay que ir en dirección Sierra Alhamilla (no hacia Pechina), por la AL-3100. Recorriendo otros 3 kilómetros (4 minutos), hay que estar atento al camino de tierra que se abre a la derecha (puede servir fijarse en que hay una caseta de alta tensión). Ese camino pedregoso lleva hasta los decorados.

Una vez que se llega a la caseta de alta tensión (tiene un grafiti que pone PEO), hay que tomar el camino de la derecha, que desciende hacia una rambla. Cuando se llega a abajo, hay una roca grande y se bifurca el sendero. Hay que ir hacia la derecha (si se toma el camino de la izquierda se llega a los decorados de Penny Dreadful).

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Alcazaba de Almería: Palacio de Lanza del Sol, Dorne

La Alcazaba de Almería, uno de los escenarios de Juego de Tronos en Almería. | HBO
La Alcazaba de Almería como palacio de los Martell. | HBO

La última parada es en el reino de Dorne, el más sureño de Poniente y que está gobernado por la Casa Martell. Para recrear uno sus jardines se eligió el patio de los Nenúfares de la Alcazaba de Almería (una temporada antes habían usado el Real Alcázar de Sevilla para Dorne).

Aparece en el primer capítulo de la temporada seis. Ellaria Arena asesina al rey Doran Martell en su propio palacio y ante la mirada impasible de sus soldados. Para el rodaje apenas tuvieron que colocar unas cuantas plantas más en el patio, algo de atrezzo y el escudo de los Martell sobre uno de los muros.

Patio de los Nenúfares de la Alcazaba de Almería. | V. Visiedo P./QVEA

La Alcazaba de Almería forma, junto al lienzo de muralla del cerro de San Cristóbal, uno de los más impresionantes conjuntos monumentales defensivos medievales de Al-Andalus. Sin embargo, el Patio de los Nenúfares es del siglo XX. Se construyó en la década de 1950, inspirado en ejemplos alhambrinos. La entrada a la Alcazaba es gratuita y merece la pena detenerse en conocer todos sus espacios.

YouTube

Al cargar el vídeo, acepta la política de privacidad de YouTube.
Más información

Cargar vídeo

Cómo llegar a la Alcazaba de Almería

En poco más de 20 minutos se puede llegar desde Pechina a la Alcazaba de Almería. Hay que coger la autovía A-92 en sentido Almería. Y seguir luego por la A-7 en dirección Almería/Puerto/Málaga. Tras recorrer toda la circunvalación de Almería se toma la salida 438 Almería/Vía Parque/Puerto para entrar a la ciudad.

Se accede a Almería por la zona portuaria y el barrio de Pescadería. Hay que continuar por la carretera de Málaga, dejando el Parque Nicolás Salmerón a la izquierda, hasta llegar a la rotonda conocida como Fuente de los Peces, donde hay que girar a la izquierda. Luego solo hay que seguir por el paseo de San Luis, girar a la derecha por la calle de Reina y de nuevo a la izquierda por calle Almanzor. Siguiendo recto, a los pies de las murallas de la fortaleza, es fácil aparcar junto al Mesón Gitano.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Una última parada tras el recorrido por los escenarios de Juego de Tronos en Almería

Una vez concluida la visita a la Alcazaba, no hay nada mejor que recuperar fuerzas yéndose de tapas por Almería. La primera parada puede ser en la tetería Almedina Baraka, justo frente a la entrada del conjunto monumental, donde se puede disfrutar de unas impresionantes vistas.

 

La estación, Cortijo Moreno, la iglesia de Santa María, Las Mascaranas, la romería del Potro, Los Peñoncillos y Villa María, siete elementos que ver en Huércal de Almería

Lindando con Almería capital, con la que comparte la Torre de Cárdenas, Huércal de Almería comienza a desquitarse de la etiqueta de ‘ciudad dormitorio’ y a mostrar un rico patrimonio que le ha llevado a colocarse en el mapa turístico provincial. Es mucho el patrimonio arquitectónico, arqueológico, etnográfico y natural que ver en Huércal de Almería, que se posiciona en los últimos tiempos, además, como destino de referencia para el deporte urbano.

Dentro de todo lo que hay que ver en Huércal de Almería, este recorrido va a pasar por lo que en la propia localidad se han definido como ‘Las 7 maravillas de Huércal de Almería’, elegidas por votación popular en una encuesta ideada durante los meses de confinamiento. Así, esta selección está escogida por sus propios vecinos, y si bien no sigue el ranking oficial, sí que se exponen de manera que permite recorrerla de manera ordenada:

Palacio y Cortijo de Las Mascaranas

Ayuntamento de Huércal de Almería. | Tito S./QVEA
El Palacio de Las Mascaranas es hoy sede del Ayuntamiento de Huércal de Almería. | Tito S./QVEA

El edificio que hoy alberga el Ayuntamiento de Huércal de Almería forma originariamente parte del Cortijo Fischer, construido a principios del siglo XX por una familia danesa, los Fischer, que lo utilizaron como residencia de verano (la principal la tenían en el Cortijo del Gobernador en Almería) y también para el trabajo de la uva, de la que eran exportadores.

Originariamente cercada hasta la carretera, de ahí el nombre de El Cercado que recibe el barrio, se puede acceder tanto desde esta, la A-1001 que baja desde Torrecárdenas hacia el casco antiguo (la indicación queda a la izquierda, en una zona ajardinada e inmediatamente anterior a una calistenia y rocódromo), como desde la N-340, indicada por una señal, algo escondida, eso sí, tras un arbusto, hacia el Ayuntamiento. Si tiráis por esta vía, estad atentos.

El nombre de Las Mascaranas le viene dado por una serie de mascarones redondos, que rodean el edificio por su parte superior, destinada en sus días al trigo. Durante la Guerra Civil, el cortijo fue requisado y utilizado como prisión, junto con la de El Ingenio en Almería. Tras la guerra, decayó la uva y el cortijo se abandonó.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

La estación de Huércal-Viator

La estación de Huércal-Viator es, y no lo decimos nosotros, sino los propios ciudadanos, la principal ‘maravilla’ que ver en Huércal de Almería. Un referente fundamental de la vida del último siglo en el municipio, que hoy alberga la sede de la Mancomunidad del Bajo Andarax y del Centro de Información de la Mujer de esta entidad.

Qué ver en Huércal de Almería: la estación de tren de Huércal. | Tito Sánchez Núñez/QVEA
Estación de tren de Huércal-Viator. | Tito S./QVEA

Se sitúa a la entrada del casco antiguo del municipio, llegando desde Almería a través de la misma carretera que se adentra en la localidad a través de El Cercado. Todo el conjunto en sí aglutina toda una infraestructura de equipamientos ferroviarios del municipio y que, si bien su uso es hoy en día administrativo, en 2020 y 2021 recuperó temporalmente su uso original, debido a las obras en la estación de tren de Almería.

El edificio principal es la estación de tren y consta de dos plantas. Junto con la estación de tren de Gádor, es la que mejor estado de conservación tiene hoy en día en la comarca del Bajo Andarax. Forman parte del conjunto, además, la caseta de ferroviarios, que pertenece a la Asociación de Amigos del Ferrocarril, y que alberga un museo del ferrocarril que se encuentra cerrado, y el muelle de carga.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

La iglesia de Santa María de Huércal de Almería

Iglesia de Santa María. | Ayto. Huércal de Almería
Iglesia de Santa María. | Ayto. Huércal de Almería

En la calle Real, a muy pocos metros de la estación de tren, la iglesia de Santa María es el monumento más antiguo que se conserva en Huércal de Almería. Se trata de una iglesia renacentista, de una nave de cajón y armadura mudéjar, de la que se conserva parte de la cabecera, hecha con cantería, similar a la iglesia de Santiago de Almería, y contrafuertes en ambos lados y portada renacentista que se presupone de la escuela de Juan de Orea, quien ya hiciera la de la Catedral de Almería, la misma iglesia de Santiago de la capital o la de San Ginés de Purchena.

En el siglo XVIII, a medida que crecía el municipio, se separó de la iglesia de San Sebastián de las Huertas de Almería, ampliándose con dos naves laterales barrocas, con material de mampostería más pobre, y sin cubrirse ya de armadura mudéjar. De esta época es también un Calvario, muy similar a los de la calle Soto y Almedina de Almería, que apreció al descubrir la fachada, y que se dirigía por la calle de Las Palmeras y Argar hacia el Cerro del Calvario. También se aumentó en esta época el campanario, que fue volado en la Guerra Civil.

En cuanto a imaginería, es de gran valor la titular, Santa María, una Inmaculada de gran tamaño del taller del Navas Parejo, mismo autor que la Virgen de las Angustias de Almería o el Corazón de Jesús del Cerro de San Cristóbal. Destacan igualmente un Corazón de Jesús de 1910; un Cristo de la Expiración, en la entrada, que ha sobrevivido a varios incendios, y un Niño Dios que procesiona el Sábado de Gloria.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

La araucaria y Cortijo Moreno

Patio interior de Cortijo Moreno, con la araucaria. | Tito S./QVEA

Cortijo Moreno es una hacienda residencial reconvertida en centro cultural a la que se puede acceder tanto por la calle Molineta como desde el Paseo del Generalife. En ambos casos, hay que continuar la calle Real y la estrecha calle del Pueblo y cruzar las vías del tren. Después hay que seguir estas de forma paralela y en dirección contraria a la que veníamos, hasta dar con estas calles.

Se trata de un antiguo terreno que fue propiedad de Antonio Moreno, con huertos y jardines reconvertidos hoy en huertos urbanos y un edificio de finales del siglo XVIII, si bien lo que queda hoy en día es de finales del XIX. En su portada principal, la que se accede por la calle Molineta, se encuentra una gigantesca y singular araucaria de 50 metros de altura y 3,2 metros de perímetro. Esta es visible desde la práctica totalidad del municipio y está perfectamente alineada con la puerta de la iglesia de Santa María, al otro lado de las vías del tren.

El edificio alberga hoy los estudios de la emisora municipal Candil Radio y, en la parte baja, el Centro de Interpretación Etnográfica de Huércal de Almería, el Museo del Esparto y el Centro de Información Juvenil, y su patio acoge diversos actos culturales, paredes que cobran vida con una colección de grafitis y los restos arqueológicos de dos grandes piedras de molino romanas procedentes de las zonas de Zamarula y Los Pinos, una de ellas utilizada en rituales en época romana.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Lavadero de Los Peñoncillos

Lavadero de Los Peñoncillos, una de las ‘maravillas’ que ver en Huércal de Almería. | Tito S.

La forma más fácil de llegar al Lavadero de Los Peñoncillos es haciéndolo desde la carretera N-340a, desde el barrio de El Palomar, si bien hay que atravesar un camino privado, por lo que puede darse el caso de que algún día te lo encuentres cortado. Otra vía de acceso es desde el barrio Visiedo, cruzando el Cortijo Almazarilla. Una tercera opción es desde el barrio del Potro, por un camino que pasa por debajo de la autovía.

El Lavadero de Los Peñoncillos es el lavadero más grande y visible del municipio, de tres naves, la central en la que se ubicaban las pilas y los laterales donde las mujeres y gentes de todo el pueblo acudían a lavar. Contaba con dos accesos y la particularidad de que uno de los muros está embutido en el desnivel del terreno. Por el otro lado, se encuentran huecos rectangulares para ventilación.

Actualmente ha sido reformado por el Ayuntamiento, que lo quiere convertir en una zona expositiva, relacionada con un museo del agua al aire libre, así como en escenario de actividades culturales. En sus alrededores se van a habilitar aulas didácticas medioambientales.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Romería del Potro por la Virgen del Carmen

Ermita del Potro en Huércal de Almería. | Tito S./QVEA

La del Potro es la única romería que todavía hoy perdura en Huércal de Almería. Se inició en los años 50 en torno a la primitiva ermita de la Virgen del Carmen en la entrada del pueblo. Esta, exactamente igual a la ermita de la Santa Cruz de Albox, terminó desapareciendo.

Es tanta la devoción de los huercalenses por la Virgen que es la que más hornacinas tiene por barrios. Mucha gente, de hecho, se sienta en las puertas de sus casas, sacando a la Virgen. De ahí que se construyera una nueva ermita en el barrio de Alcaraz, conocido hoy como barrio del Carmen, por la ermita, o, también, del Potro, por un conocido restaurante. El barrio está a las afueras de Huércal, llegando, desde Almería, por la N-340a hasta la rotonda de acceso a la autovía en dirección Málaga; por el pueblo, por la continuación de la calle Real, o, desde Los Peñoncillos, por el camino que pasa por debajo de la autovía.

El día 14 de julio, la imagen de la Virgen del Carmen se lleva hasta la iglesia de Santa María. Un día después, víspera de la celebración, toda la gente del barrio se acerca al pueblo. Tras la misa suben la imagen a una carroza y se la llevan de vuelta a la ermita, donde se vela durante el día 16.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

Ermita de La Peinada y Villa María

Villa María, un BIC que ver en Huércal de Almería. | Ayto Huércal de Almería
Villa María, un BIC que ver en Huércal de Almería. | Ayto Huércal de Almería

También junto a la autovía, entre las rotondas de acceso hacia Murcia y Málaga, se encuentra otro conjunto seleccionado como ‘maravilla’ que ver en Huércal de Almería. Se trata, además, del único Bien de Interés Cultural en Huércal de Almería, Villa María.

Villa María es un palacio modernista con tres fachadas triangulares en los que destacan sus pórticos con figuras de animales o azulejos, y un conjunto hidráulico a su alrededor, con una balsa redonda y otra cuadrada. Pertenece a una importante familia almeriense, los Vega Barranco. Aunque recientemente se han realizado allí grabaciones de películas, no se puede visitar al estar habitada durante gran parte del año.

Enfrente de este BIC, una ermita neoclásica, muy original, que algunos llaman ermita de la Peinada, otros ermita de San Antonio, ermita de la Auxiliadora e incluso ermita de la Paloma. Pertenece a lo que antiguamente fue la hacienda de La Pinada y es una ermita-panteón con una singular forma triangular. Uno de sus lados está pegado a un camino que hoy es privado e impide el acceso, otra pared está adosada al concesionario Hyundai y la parte trasera está situada sobre una acequia. Conserva sus pinturas originales y en la puerta tiene un atrio similar al que se puede ver en Cortijo del Fraile.

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa

También hay que ver en Huércal de Almería…

Os hemos presentado las siete ‘maravillas’ de Huércal de Almería, pero en esta localidad hay mucho más para ver: la torre de Cárdenas, que aparece en su escudo y que limita con Almería capital, desde donde se accede; la portada del Palacio de Boleas, que hoy luce en la fachada de la Biblioteca Municipal de Huércal de Almería, en la plaza de la Constitución, junto a la iglesia de Santa María; la Casa del Médico, la mejor representación de la arquitectura burguesa de la segunda mitad del siglo XIX en el municipio, situada entre la estación de tren y la iglesia; cuevas, yacimientos… Incluso el festival de música decano de la provincia de Almería, Candil Rock, que opta a ser declarado como Evento de Interés Turístico, forma parte también de todo aquello que tienes que ver en Huércal de Almería.

Una ‘maravilla’ también para comer

Fuera de carta, terminado este paseo encontramos una ‘maravilla’ más, en este caso tanto por sus salones y jardines como por su gastronomía, en el Restaurante Casa Rafael. Tomando nuevamente la carretera N-340a en dirección a Benahadux, veremos este conocido y espectacular restaurante a mano izquierda. Si hacemos completa la rotonda del acueducto de Zamarula y regresamos en dirección a Huércal de Almería, a pocos metros podremos acceder al restaurante. Un consejo: no te vayas sin probar el bacalao ‘a la manera’ de Rafael.

Bullicio. Son muchas las conversaciones que se entrelazan a la vez. Ese jaleo implícito del centro, del corazón de cualquier ciudad, en el camino que va desde la plaza Pablo Cazard y la Escuela de Bellas Artes hacia la plaza de la Catedral de Almería a través de las calles Trajano y Eduardo Pérez. Una vez allí, dejando el templo aparte, no hay arquitectura alguna. No al menos en sí misma, a simple vista, pues es justo lo que pretendían Alberto Campo y Modesto Sánchez, arquitectos de su última remodelación 20 años atrás.

Mirando bien, las veinticuatro palmeras que forman y acogen la plaza no son casualidad. Más altas que la catedral, actúan de columnas para que el espacio luzca como si fuera una nave más. Tiene su razón de ser en que la plaza no eclipse jamás a los edificios que alberga. Gracias a esta sencillez y amplitud, escasa de fuentes o bancos, el protagonismo recae únicamente en la propia catedral y el Palacio Episcopal. Una apuesta por la estética.

Fachada de la catedral de Almería

Si hay algo que llama la atención nada más llegar a la plaza de la Catedral es la imponente fachada de la catedral de Almería. No importa desde qué calle se venga. Con el primer vistazo ya se nota su condición de fortaleza, protectora de los ataques piratas y moriscos que querían atacar la ciudad. Por ello no destacará por su gran altura, ya que así podía defenderse mejor ante las ofensivas de artillería.

La fachada, del siglo XVI, está compuesta por tres cuerpos estéticos en posición horizontal de arte principalmente renacentista con rasgos del gótico tardío. Obra de Juan de Orea, yerno del autor del Palacio de Carlos V de la Alhambra de Granada, su portada busca además de reflejar lo divino actuar de propaganda política del poder de dicho emperador. Puede verse reflejado en los relieves que representan los trabajos de Hércules -una asociación del Estado con los mitos para dotarlos de poder y supremacía-, en el escudo imperial del águila de dos cabezas o en los jarrones decorativos.

Plaza de la Catedral de Almería. | Esperanza Murcia/QVEA

Bajando la mirada, la parte intermedia de la portada está dedicada a la exaltación de la Encarnación de la Virgen María, nombre por el que se conoce a la catedral y la entrada principal del templo. Este acceso responde al clásico arco de triunfo romano que sirve de puente entre el mundo terrenal y el espiritual. En la parte inferior, se observa el escudo del Obispo Villalán, quien mandó a construir la catedral.

Palacio Episcopal

Palacio Episcopal de Almería. | Esperanza Murcia/QVEA

Deslumbrados por el poder de la catedral, si nos giramos y miramos para atrás vemos el Palacio Episcopal. Hablamos de la primera residencia oficial de la alta jerarquía eclesiástica de Almería. El edificio que vemos hoy, de elementos eclécticos, se debe a los arquitectos almerienses Trinidad Cuartara y Enrique López Rull que iniciaron su remodelación en 1894 bajo las órdenes del obispo Santos Zárate. El palacio sigue una estructura cúbica donde se mezclan distintas piezas de estilo medieval y clasicista.

El entorno: el Sol de Portocarrero y el Museo de la Guitarra

La plaza de la Catedral de Almería es la unión de su centro urbano, conectando con los grandes puntos de interés de la capital. Sus vertientes nos pueden llevar hasta la Plaza Vieja donde se encuentra el Ayuntamiento, a la mágica Alcazaba o retornar a las calles más prolíferas de bares de la ciudad.

Pero, ¿y si la bordeamos? Merece la pena descubrirlo. Rodeando la catedral por la izquierda encontramos el Sol de Portocarrero, o Sol de Villalán, un bajorrelieve de rostro antropomorfo rodeado de una cinta renacentista y que es uno de los símbolos oficiales de la ciudad de Almería. Se encumbra en el exterior de la Capilla del Santo Cristo de la Escucha, la más antigua de la catedral y donde se encuentra enterrado el obispo fundador de la misma Fray Diego Fernández de Villalán. En la tradición cristiana, el sol se empleaba como un símbolo de Jesús resucitado.

Sol de Portocarrero en la Catedral de Almería. | Esperanza Murcia/QVEA

Siguiendo el mismo camino, siempre bordeando el templo, llegamos al Museo de la Guitarra. Una buena oportunidad para conocer la historia del instrumento y al creador de la guitarra actual, el almeriense Antonio de Torres. Durante el recorrido, vale la pena observar el arte de la propia ciudad. Las fachadas de sus edificios más antiguos, los grafitis, cuadros del hoy, que decoran sus paredes. Y así, sin darnos cuenta, llegaremos a otro de sus grandes atractivos, la Puerta de los Perdones, un trasunto de la portada principal también obra de Juan de Orea.

Cerrando el círculo, regresamos a la plaza de la Catedral. Nos encontramos de frente al hotel del mismo nombre, construido en una de las viviendas señoriales del siglo XIX y de la que aún se conserva su fachada. Allí podremos degustar un rico pescado gallo pedro, frito o a la plancha, o un sabroso pulpo a la brasa. Son las dos especialidades de la casa que aguarda en su espacio superior una de las mejores terrazas de la capital. Cócteles, platos al centro y pinchos con unas vistas de ensueño, no ya sólo de la catedral sino también del conjunto monumental de la Alcazaba que se contempla al final.

La plaza de la Catedral, el principio de otro camino

Inicio del Camino Mozárabe de Santiago. | Esperanza Murcia/QVEA

Echa la parada, de vuelta a la plaza, hay algo nos llama. Un aviso. Y es que, desde este punto, cuando era ya el final del recorrido, se puede empezar otro camino. El del Camino de Santiago. La plaza de la Catedral de Almería es la partida de una de sus rutas que aun siendo más desconocida no es menos atractiva, la mozárabe. Un final de paseo que puede convertirse en inicio de un nuevo viaje. 

Horarios y tarifas de la Catedral de Almería

Estos son los horarios temporales para visitar la Catedral de Almería. Cabe señalar que están sujetos a posibles modificaciones por parte de la entidad. 

  • Lunes: Cerrado.
  • Martes: 10:30h a 15h.
  • Miércoles: 10:30h a 15h.
  • Jueves: 10:30h a 15h.
  • Viernes: 10:30h a 15h y 16h a 19h.
  • Sábado: 10:30h a 15h y 16h a 19h.
  • Domingo: Cerrado. 

La última entrada tiene lugar 45 minutos antes de la hora de cierre. En cuanto a sus tarifas, son las siguientes:

  • Entrada general (18 a 64 años): 5 euros. 
  • Reducida para mayores (a partir de 65 años): 4,50 euros. 
  • Entrada joven y/o estudiante (13 a 17 años y personas con carnet joven o universitario hasta 25 años): 3 euros. 
  • Grupos (20 personas o más): 3 euros. 
  • Gratuita: menores de 12 años acompañados de un adulto, discapacitados +63%, niños de familias numerosas (hasta 17 años) y empadronados en la ciudad de Almería. 

Para los fieles existe también el horario especial de misa, celebrándose de lunes a sábado a las 9:00 horas (misa conventual y laudes) así como a las 19:30 horas. Los domingos hay una única celebración eucarística a las 11:30 horas, celebrada por el obispo. Para más información se puede consultar su portal web, donde se recogen las últimas noticias. 

Google Maps

Al cargar el mapa, acepta la política de privacidad de Google.
Más información

Cargar el mapa